Convivencia familiar en el aislamito
Cuando no tenemos que pasar mucho tiempo en familia podemos llegar a pensar que no hay problema alguno, pero en momentos como el actual, en el que no podemos salir pueden surgir algunos roces afectando la convivencia familiar en el aislamiento.
Y es que el encierro al que nos ha sometido la pandemia del coronavirus puede generar, según los expertos, estrés, ansiedad y mucha angustia haciéndonos más susceptibles a las palabras o comentarios.
Durante la convivencia familiar en el aislamiento, ahora más que nunca es necesario contar con herramientas para manejar estas y otras emociones. Específicamente aquellas que nos permitan calmar nuestro sistema nervioso y asegurarnos de no estresar a nuestros seres queridos.
Es probable que las familias peleen más de lo común durante el aislamiento y lo mejor que podemos hacer por nuestras relaciones es tomar conciencia de nuestras emociones y aprender habilidades para calmarlas para que no nos portemos tan mal.
Cuando las tensiones aumentan y nos encontramos luchando con las personas que amamos más que a nada en el mundo, necesitamos detenernos y reflexionar sobre lo que está sucediendo en el interior.
Cuando comiencen las peleas, prueba estos 10 consejos para que la convivencia en el aislamiento sea más llevadera.
- 1Tómate un tiempo para reflexionar.
- Identifica lo que estás experimentando. ¿Tienes miedo? ¿te sientes frustrado? ¿Triste? ¿Ansioso? ¿Nervioso? ¿Te sientes enfermo por dentro, solo o sin cuidado? Cualquiera que sean tus sentimientos, simplemente detente y valídalos. No hay una forma incorrecta de sentirse, solo formas incorrectas de comportarse.
- Control de autocuidado. Pregúntate ¿Tengo hambre o cuándo comí por última vez? Muchos de nosotros estamos en la dieta de ansiedad. Pero incluso si no tenemos apetito, debemos comer para evitar que nuestro estado de ánimo caiga en picada. ¿Estoy cansado?
- El estrés es un factor que puede afectar el sueño, nos puede hacer dormir mucho o todo lo contrario, saber si estás cansado es importante para que puedas entender tu estado de ánimo. Hágales saber a sus seres queridos que no está enojado con ellos y que no hicieron nada malo. Es el cansancio hablando.
- Comprobar la realidad. Para esto cabe hacerse la pregunta: ¿Estoy físicamente bien, además de sentirte asustado, ansioso, aburrido, encerrado, triste y enojado? La mayoría de nosotros estamos “bien” en este momento. Solo reconocer esto con una agradable respiración larga y profunda puede ofrecer algo de alivio. Si bien todos necesitamos ponernos en cuarentena para cuidarnos a nosotros mismos, a nuestros seres queridos y para ser buenos ciudadanos, también debemos relajarnos.
- Recuérdales a tus allegados y a ti mismo que esta situación es temporal.
- Cuando sintamos tensión, nervios, miedo o incluso enojo, la mejor manera de canalizar esas emociones es a través de ejercicios de meditación al menos cuatro veces durante el día para calmar la mente y el cuerpo.
- Cambia tu entorno si es posible y adopta una actitud juguetona, proactiva. Puedes intentarlo para que el cerebro comienza a cambiar. Camina, corre, patea una pelota, baila, cuenta pájaros, aprendete los nombres de los árboles. Si tienes jardín empieza a sembrar o simplemente nombra los colores, sonidos y texturas en el ambiente.
- Si no puedes mirar fotos de la playa, las montañas o de cualquier lugar que ames. Imagina que estás allí y vívelo vicariamente. La imaginación y el juego van de la mano. Ambos son excelentes para calmar el estrés e importantes para el bienestar tanto de niños como de adultos.
- Haz una lista de cosas simples que ayuden a calmar, para pasar de un estado mental de angustia a uno más tranquilo. Estos cambiadores de estado son perfectos para esos momentos de irritabilidad aguda o angustia. Se debe ejecutar cada cambio de estado uno por uno hasta sentir un alivio. Aquí algunas cosas que pueden funcionar:
- Ejercicio
- Tomar una ducha caliente
- Tomar té
- Escucha música o un podcast
- Video chat o llamar a un amigo
- Mira un programa de televisión
- Leer o escuchar libros solo o con la familia
9. Comparte con tus seres queridos cómo te sientes, siempre desde la autenticidad y lo más profundo. Probablemente sientan lo mismo. No hay necesidad de arreglar nada. Es sorprendente cómo hablar abiertamente sobre los sentimientos transforma un mal sentimiento en algo mejor.
10. Cada vez que quieras decir algo desagradable o malo a alguien de tu familia, ¡no lo hagas! procura pensar antes de hablar y recurrir a otros sentimientos como amor, bondad, cuidado y compasión.
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¿Cómo reforzar los lazos familiares?
Con los consejos mencionados esperamos que la convivencia familiar en el aislamiento sea mucho más llevadera, pero también debemos verle el lado positivo a esta situación. Debemos verlo como el momento perfecto para reforzar los lazos familiares, sobre todo para aquellos que tienen hijos.
Este tiempo puede ser aprovechado por los padres para dar ejemplo e inculcarle valores a sus hijos, pues los pequeñines perciben todo lo que hacen sus padres y copian todo lo que ven. Si los niños ven a sus papás concentrados en su trabajo, ellos se concentrarán en el estudio; la disciplina es un concepto que se les puede transmitir.
Otra manera de reforzar los lazos familiares es apreciando esos pequeños momentos familiares como la hora de almorzar, ver películas juntos. No dejemos de abrazar a nuestros hijos y hacerles cosquillas, compartir la comida o leer juntos, todo esto hace que nos conectemos con los más pequeños y reforzando los lazos familiares.
La adversidad brinda una oportunidad para el cambio. No dejes que esta situación te afecte, trabaja en tus emociones sabiamente y no te desquites con las personas que amas.
En La Ascensión creemos en la importancia de la familia, sobre todo en estos momentos de cuarentena en el que muchas emociones y sentimientos pueden invadirnos y hacernos cometer imprudencias. Por eso te damos esta guía de consejos para que la convivencia familiar en el aislamiento sea más positiva que negativa.
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